El Litio es chileno.

En la actualidad se reconoce que los recursos naturales son elementos estratégicos para los Estados. En este sentido el agua, el petróleo, y la biodiversidad se posicionan como elementos de relevancia para las decisiones de los gobernantes. 

En el caso de Chile tenemos la situación que se ha generado con el LITIO. Este elemento desde el año 1979 es considerado por la legislación chilena como de interés nacional, por lo que se posiciona como un recurso exclusivo de defensa nacional. Es decir, se niega toda posibilidad de que sea concesionado.

Ante este escenario se pueden observar dos visiones. Por un lado, al estar protegido por el Estado se promueve la solvencia de que en la medida que este recurso sea necesario; el Estado Chileno tiene la potestad exclusiva para explotarlo, no obstante, en una posición contrapuesta vemos como al no incluir inversores extranjeros se aplaza y estanca el crecimiento económico que podría alcanzar Chile si hoy en día se invirtiera en la explotación de éste. 

Pero ipso facto, podemos ver como ya el ministerio de minería esta en conversaciones con empresarios estadounidenses para llegar a un proceso público de licitación del Litio, ya que igualmente la legislación chilena de 1973 permite realizar contratos especiales con este tipo de sustancias.

Considero necesario incluir dentro de la opinión pública este tipo de temas, considerando que esta en juego el futuro económico y social de nuestro país.